jueves, 4 de febrero de 2016

TAJO DEL AGUILA · ALGAR

    Qué buenos y qué necesarios son los fines de semanas rurales. Para desconectar, para fotografiar...y para aprovechar y probar nuevas técnicas.

    Lo primero que quiero hacer es hablaros del lugar. Un complejo turístico situado en Algar, en plena Sierra de Grazalema, casi situado en un balcón natural al embalse de Guadalcacín. 

    El entorno es realmente acogedor. Desde que abres la puerta ya se puede disfrutar de unas excelentes vistas y apenas caminando unos metros dan comienzo varios caminos senderistas que desembocan, según la dirección que tomes, en el embarcadero a orillas del embalse, en una pequeña zona recreativa, o en varios miradores con vistas todos ellos al embalse. 

    El privilegio de un complejo rural como éste es el aislamiento de las grandes ciudades, la escasez de contaminación tanto ambiental como lumínica, disfrutar del silencio de la naturaleza, respirar aire puro y sentir un aire muy diferente al de la ciudad. 

    Como os digo, sobre los varios miradores que rodean el complejo, lo ideal es haber hecho una prospección de día, disfrutar de un agradable paseo y decidir desde qué mirador ir a ver el atardecer. Depende de la época del año, os puede interesar uno más que otro. 


Atardecer. Embalse de Guadalcacín 

    Una vez caída ya la noche, si el tiempo se porta bien, no necesitáis iros lejos para ver un cielo limpio y lleno de estrellas. Y si sois madrugadores, no os costará trabajo levantaros para ver amanecer desde un mirador situado justo al final del parking del propio complejo. Merece realmente la pena ver todo el embalse cubierto por la humedad que casi llega hasta nuestros pies, y poco a poco ir descubriendo la luz que va ganándole terreno a la noche y disipando el frío. 

    Os he comentado al principio, que un sitio así es perfecto para probar nuevas técnicas. Y es que si sois de los que (como yo) va con su cámara a todos lados, tenéis la posibilidad de hacer paisajes, amaneceres y atardeceres, largas exposiciones tanto diurnas como nocturnas, hacer fotos de esas tan atractivas en las que se ven las estrellas, lightpainting, time lapse...casi lo que se os ocurra.

    Mi idea era, además de hacer algunas fotografías de paisaje y nocturnas, sobretodo probar mi reciente GoPro. Y no porque no hubiera hecho ciertas pruebas ya en otros entornos, si no porque iba ya con las ideas muy claras en mente: hacer time lapse del atardecer, del amanecer y uno nocturno. Conozco el potencial de esta pequeña cámara, y de lo que es capaz, pero como todo "cacharro electrónico" lleva su tiempo (a veces más otras menos) dominarlo y manejarlo con soltura hasta conseguir los mejores resultados. Qué podría deciros de esta cámara que ya no se haya visto o se sepa. Es un complemento perfecto para la fotografía de viajes. 





Uno que ya conocéis probando y disfrutando. 


    Tanto en el atardecer como el amanecer, durante aproximadamente una hora y pico tuve la GoPro haciendo un time lapse. Pensaréis quizás, con tanto tiempo habré conseguido algo bueno. Creedme, ese tiempo no es suficiente. Por eso era la ocasión perfecta para practicar, mientras yo hacía mis fotos, el time lapse hacía lo suyo. Es lo que tiene ser novato, que uno no controla nada de lo que hace. Por cierto, si vais a hacer algún time lapse de noche, aseguraos de que habéis quitado la tapa del objetivo, podéis imaginar el excelente resultado. 

    Dejando de lado la ironía y ya acabando que esto se hace largo, buscad tiempo para disfrutar de la naturaleza de vez en cuando. Os merecerá la pena, y seguro que volvéis con buenas experiencias, y por qué no, buenas fotos. Y ahora ya si os dejo con algunas de las fotos del fin de semana, nocturnas si, son las que más me han gustado. Espero que a vosotros también.



La noche en el Tajo del Águila

Por último, el amanecer.



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